NINO SÁNCHEZ CELEBRÓ SU 45º ANIVERSARIO EN LA MÚSICA

El Teatro Tomás y Valiente se llenó para presenciar el concierto de Nino y sus amigos

Teatro Tomás y Valiente (Fuenlabrada, MADRID)

FUENLABRADA, MADRID (Por Pepe Machado) Eran cerca de las ocho de la tarde y el Teatro Tomás y Valiente ya estaba casi lleno. En los camerinos, los amigos de Nino conversaban animadamente. De pronto, Carmen elevó la voz para anunciar ¡es la hora! La gente se aprovisionó de botellas de agua y la seguimos por pasillos y pasadizos hasta llegar a las bambalinas o laterales del escenario.   

Los técnicos se hallaban en sus puestos. Yo, como presentador, tenía que salir el primero, claro está. La señal convenida era que se encendería un foco en el centro del escenario y entonces yo saldría a hacer la presentación. Así fue, la gente me recibió con un aplauso que yo agradecí y a continuación pronuncié estas palabras…

Hay momentos en la vida que un artista no cambaría por nada. Y este de hoy es uno de ellos.

Nino Sánchez va a recibir el afecto y el homenaje de sus amigos y colegas para celebrar junto a él la efeméride irrepetible del 45 aniversario de su andadura profesional en el mundo de la música.

El periodista Pepe Machado durante la presentación del concierto.

Nino Sánchez, efectivamente, se doctoró como cantautor y folklorista en el legendario Festival Hispano Portugués de la Canción del Duero, en 1966, en el que fue distinguido con el Premio del Instituto de Cultura Hispánica a la mejor letra.

A partir de entonces, Nino recorre un largo camino por España, por gran parte de Europa y América, celebrando cientos de conciertos con gran éxito. Simultáneamente, sus canciones, letras y músicas, quedarían inmortalizadas en una larga colección de vinilos y casetes, primero, y cds. después.

45 años, sí, con los que Nino deja constancia de que su nombre y su obra son una referencia ineludible a la hora de hablar de música de autor y de raíz, en este país, España.

Por todo ello, aquí están con Nino, sus amigos, que haciendo gala de su  generosidad van a participar en este concierto del cuadragésimo quinto aniversario de este artista salmantino, un juglar llamado ¡Nino Sánchez!

Aparece Nino con una capa castellana

 El público recibió con un sonoro aplauso a Nino que apareció elegantemente vestido con la típica capa castellana al mismo tiempo que su banda iniciaba los compases de “Un charro de Salamanca”. Sonido perfecto, ni un acoplamiento. La banda, potente, los arreglos muy efectistas. En los coros, Lorena, guapa y segura, como siempre.

Tras un sonoro aplauso a la primera interpretación, ya roto el fuego, pero sin mediar palabra, la banda desgrana “La canción del Pizarral”. Al fondo del escenario, sobre una pantalla gigante se iban proyectando imágenes de Nino en artísticas composiciones videográficas de diferentes épocas y momentos.

Cuando Nino terminó esta segunda interpretación, ya se había establecido una corriente de complicidad entre él y el público. Así en tono desenfadado, Nino dio la bienvenida al público y presentó a su primera “invitada”:

Muchas gracias por haber venido a acompañarme en este día tan especial para mi. Será una tarde-noche cuajada de canciones y recuerdos. Me van a ayudar a realizarlo diferentes compañeros que, poco a poco, me irán acompañando en este escenario. La primera invitada es alguien muy importante en mi vida. Me aguanta en los escenarios y también en casa: ¡Carmen Casado!

Carmen, compañera sentimental y profesional de Nino aparece en escena.

Mientras Carmen se acercaba al micrófono y saludaba al público, iba tomando forma una canción que Nino escribió especialmente para Carmen: Suene la música.

Luis Eduardo Aute en imagen virtual

Terminada la canción y tras un calido aplauso a la pareja, Nino justificó la ausencia de Luis Eduardo Aute: 

A última hora, un viaje a Sudamérica nos ha  privado de la presencia de uno de los mas grandes cantautores de nuestro país, pero aquí lo tenemos virtualmente: Luis Eduardo Aute. 

Inmediatamente, sobre la gran pantalla, aparece Luis Eduardo Aute en vídeo dirigiéndose a Nino:

Luis Eduardo Aute envió un mensaje a Nino desde Suramérica.

Hola Nino, no sabes cuanto lamento no poder estar ahí contigo en este día tan especial, en este homenaje a tus 45 años de tu trayectoria, de canciones espléndidas, bellas, honestas… Con motivo de agenda no he podido estar contigo pero sabes que estoy de corazón y que soy feliz de que te hagan este homenaje que es el principio de muchas canciones más. Te deseo lo mejor de lo mejor y espero que, cuando nuestras agendas lo permitan, que nos demos un abrazo muy fuerte. Salud y muchas felicidades.    

Estas cosas suelen ocurrir. Sin embargo, Aute ha tenido la deferencia de enviar a Nino este mensaje desde Sudamérica, donde el cantautor de origen filipino tiene un público incondicional.  Inmediatamente, la banda inicia “El caballo de copas”, sobre el que cabalga, imparable, Nino Sánchez.  Al finalizar, el público agradece esta emblemática composición de Nino y este se dispone a presentar a otro de sus amigos:

Hace 45 años y unos cuantos meses que conocí en Aranda a Francisco Valenzuela, por todos conocido como Valen. Desde entonces siempre hemos sido buenos amigos. Ha cosechado grandes éxitos discográficos y ha publicado dos libros de poemas, uno de ellos recientemente. Mi amigo Francisco Valenzuela, ¡Valen!

Actuación de Nino y Valen.

Valen aparece en el escenario dispuesto a interpretar “Es un pueblo”, la emblemática canción que supuso el trampolín profesional de Nino en aquél festival donde también participó Valen, y que yo, quien escribe esta crónica, presencié en directo.

Valen, como luego me enteré, había mostrado especial interés en cantar este tema junto a Nino, que no puso inconveniente alguno. Valen cumplió como pudo su compromiso a pesar de ser una composición muy personal y no era fácil estar a la altura de Nino, su creador.

Corramos un tupido velo, o telón, en este caso pues aún queda mucho concierto por delante. 

Y llegó el momento de que Nino nos presentara a un gran músico vasco.

Compañero de Universidad, de perseguir sueños, canciones y muchachas “pucelanas” en nuestros años mozos, en Valladolid. Al son de su inconfundible  piano recorrimos Alines, Capris c’est fini y Ne me quite pas... Hoy  mi dulzaina va a coquetear con su piano en este precioso tema de su País Vasco, Aurresku: ¡Natxo Knörr!

Actuación de Natxo Knörr al piano con Nino y la Banda.

El piano, un japonés de media cola, sonó poderoso en las manos de Natxo, en ese tradicional Aurresku que los vascos reservan para las grandes ocasiones, como homenaje o bienvenida. En esta ocasión, el txistu vasco dejó paso a su pariente cercano, la dulzaina castellana de Nino, autor del arreglo. El bajo, los teclados electrónicos, el violín y la percusión completaron la potente instrumentación de este bello tema, que el público disfrutó y premió con un fuerte aplauso.   

Con recuerdos de Triana

Sin pérdida de tiempo, Nino presentó a su siguiente invitado.

Es un magnifico productor y guitarrista. Lo conocí cuando participé como  telonero en una gira de conciertos del grupo Triana, en el que él era el guitarra. Gracias a su denuncia comenzó a deshacerse la corrupta y complicada tela de araña que había tejido en la Sgae, Teddy Bautista. Y en esa lucha, sigue Luis Cobo, más conocido en el mundo de la música como ¡“Manglis”!

Nino acompañado por Luis Cobo "Manglis".

“Voy a beberme de un trago” fue el tema que interpretaron Nino y Manglis. Soberbio acompañamiento el de “Manglis” a la guitarra.

Mientras se interpretaba esta y anteriores canciones, en la gigantesca pantalla haciendo fondo al escenario, se han seguido proyectando imágenes alusivas a los argumentos de las canciones o sobre el propio Nino Sánchez. Un excelente trabajo videográfico de Desiderio Hernández Benito. 

Y como no hay que hacer esperar a las señoras, llegó el momento de recibir a una señora cantante.

Aunque la he conocido en estos últimos años, ella ha sido y es una de mis mejores amigas, siempre está cerca de mí, apoyándome, dándome buenos consejos. Además de una excelente cantautora es dueña de una maravillosa voz: ¡Amparo García-Otero!

Intervención de Amparo García Otero.

Nino y Amparo, interpretaron “Barcarola” una de las últimas composiciones de amor del salmantino. Se aprecia la experiencia acumulada por Nino y Amparo en conciertos y grabaciones. Se conjuntan con facilidad a pesar de que tienen dos voces de diferentes tesituras: él canta con voz natural y ella tiene un bonito espectro lírico. La canción les permitió el mayor lucimiento y fueron muy aplaudidos. 

Y de nuevo, se hizo el silencio y Nino presentó a su siguiente invitado.

Él fue, al alimón conmigo, el productor de uno de los discos más interesantes de mi carrera, dentro del mundo del folk, “Celtiberia”. Un disco que según comentó la critica “es pieza fundamental en la música de fusión y de raíz de nuestro país y fuente clara donde han bebido la mayoría de los grupos y cantantes que hoy día cultivan este género de música”. ¡Mario del Castillo! 

Nino entre Milena Fuentes y Amed Torrecilla.

Nino interpretó “Primer movimiento” acompañado al piano por Mario del Castillo. Es tan majestuoso el sonido del piano que, en ocasiones,  puede suplir a toda una orquesta. Y así ocurrió en este caso porque voz e instrumento  alcanzaron la compenetración.

Finalizada la actuación, Nino Sánchez parecía que iba a emular al “hombre del tiempo” pero no era agua de lluvia, precisamente, a la que se refirió en la presentación…

¡Que tiene que llover, que tiene que llover, a cantaros!... En los 70, 80, 90 y como no, en estos momentos tiene que seguir lloviendo cantaros... Es el auténtico poeta de la canción de autor española. Muy querido por todos, tanto por los veteranos como por los nuevos cantautores: ¡Pablo Guerrero!

Nino y Pablo Guerrero.

Pablo y Nino. Nino y Pablo, dos cantautores, dos folkloristas. Amapolas y espigas, pizarra y latón. Lo mejor que ha dado Extremadura y Castilla. Nos deleitaron con canciones de trabajo, a capella y con la pandereta de Nino… ¡arre buuuuurra!

Tras un largo y cálido aplauso, Nino acompañado por su Banda al completo, entonan “La montaraza”.

Y aparece otro charro bailando la jota…

Cefe Torres bailó con gracia la jota castellana.

 De pronto, desde el fondo del escenario alguien aparece bailando una jota castellana… Al finalizar la interpretación, Nino presenta al bailarín.

La elegancia, sobriedad y buen talante del baile charro lo atesora mi buen amigo y paisano ¡Cefe Torres!

Fue una hermosa pincelada. Además, Cefe Torres baila con gracia, y con una simpática expresión en el rostro. Por cierto, lucía unos zapatos preciosos. Hizo bailar a todos en el escenario. Tras los aplausos Nino nos ofrece uno de los temas más populares de su comedia musical “Carrascada”. Canción algo picantota, como las imágenes que se pudieron ver durante la interpretación de Nino: “Boca de rosa”. El público se divirtió tarareándola.

Así llegó el momento de recibir al siguiente invitado.

Siempre fue generoso con sus compañeros, y lo sigue siendo. Un gran autor y cantante, showman y, presentador del emblemático programa de televisión “Escala en Hi.Fi”: ¡Juan Erasmo “Mochi”!

Mochi y Nino con sombrero tejano.

Y Mochi apareció en escena con su característico sombrero tejano. Y con otro sombrero que entregó a Nino. Parecían dos cowboys. Posiblemente el mallorquín quiso ambientar así, la canción que iba a interpretar con Nino, “Me entregaron un fusil”. Aunque el argumento de la canción se refería a otra guerra. Era la repulsa de Nino contra el servicio militar que tuvo que cumplir ineludiblemente en su día.

Y ocurrió lo que le puede ocurrir a cualquier humano. Un golpe de tos impidió que Nino pudiera hacer una parte del dueto con Mochi, que dándose cuenta del inesperado trance siguió interpretando la canción hasta que Nino se recuperó. Todo transcurrió en segundos, menos de un minuto. La profesionalidad de ambos salvó la situación con el añadido de la simpatía de Mochi.  

El público comprendió la situación y premió a ambos con un fuerte aplauso.  Así con todo normalizado, Nino presentó a otro amigo.

Un gran amigo, fue pieza importante en el juego de la vida al que me invitaron sin yo quererlo, en el año 2002. Es mi amigo, mi abogado, mi consejero, y también un buen cantante. ¡Paco Rubiales!

Intervención de Paco Rubiales.

 “Padre nuestro” y “Mientras el cuerpo aguante” fueron los dos temas que Paco Rubiales interpretó junto a Nino. Con el fondo del segundo tema, Nino presentó a todos los componentes de su Banda: Saxo, flauta, teclados y dirección musical, Amed Torrecilla; al piano, Emilio Montero; bajo eléctrico y coros, Ángel   

Rodríguez; violín de cinco cuerdas, Milena Fuentes; batería y percusiones, Jamal el Ouraoui; voz y percusiones populares, Carmen Casado; trombones y trompetas, J. de Jesús López, José Luis González y Pedro Pimentel junior; coros, Lorena Brasero con la colaboración de Carlota, a las que luego se unió la pequeña Lucía. Al referirse a Carlota, Nino dijo:

Carlota, una de las más jóvenes colaboradoras del concierto.  

La más pequeña de nuestras invitadas, es una chavala impresionante. Estudiosa, guapa, canta bien, yo la quiero un montón y podría ser mi nieta. Pero ella ya tiene abuelo, Pedro. Es mi amiga Carlota. 

La pequeña Lucía se une a los coros.

A continuación Nino con toda la Banda y Coros, al completo, interpretó “Charreando”. No se olvidó Nino de otras personas imprescindibles que contribuyeron al éxito del concierto: Roberto Álvarez  y Maite Jiménez, diseñadores del montaje luminotécnico; el técnico de grabación del audio de la Casa de la Música de Fuenlabrada, el técnico de grabación del vídeo, Juan Carlos Villa; la realización de los cortos de vídeo, Desiderio Hernández Benito, y a la Concejalía de Cultura del Ayuntamiento de Fuenlabrada. 

Completados estos agradecimientos, cuando de pronto, desde el patio de butacas, se escuchó el sonido de unas gaitas … sí, eran gaiteros gallegos… el cuarteto Monicreque Gaiteros, interpretando aires celtas mientras se aproximaban al escenario para unirse al acompañamiento de la siguiente  invitada.

Es tan guapa y rebelde como la otra Helena, la de Troya, pero ella es  pucelana, yo siempre la llamo la princesa del Pisuerga. Hizo una gran carrera como la voz cantante de Los Mismos y sigue en la brecha en solitario cantando y presentando programas en televisión. Mi buen amiga Helena Bianco. 

Actuación con Helena Bianco y Monicreque Gaiteros.

Banda, gaiteros y coro se unieron para acompañar a Helena y a Nino en el poema de Miguel de Unamuno “Enchinarrado de estrellas”, título también del último cd de Nino, y autor de la música de este tema que alcanzó así el acento gallego, el sabor celta, que requería el texto. La interpretación fue muy aplaudida por el público, que recibió complacido las dos siguientes interpretaciones: “Porque antes yo fui casado” y “Hogueras de San Juan”.

Los ‘bravos’ fueron abundantes, el público pedía más. Nino tuvo que regalar dos bises o repetición de dos de los temas que ya había interpretado.  

El concierto podría haber continuado pero el horario se había superado largamente por lo que se imponía despedir el concierto. Así lo hizo Nino, agradeciendo al público la calida acogida, junto a todos sus compañeros en el escenario recibiendo el último aplauso. 

Nino y sus amigos participantes en el concierto que culminó con bravos y largos aplausos.

 

Con ramos de flores para las damas terminó el concierto.

Mientras el público desalojaba el teatro Tomás y Valiente, por cierto, muy bien equipado técnicamente, Nino atendió a varios amigos, que quisieron felicitarle personalmente. El charro de Salamanca estaba algo cansado por el esfuerzo pero inmensamente feliz por haber podido celebrar su cuadragésimo quinto aniversario ante su público y junto a sus amigos y compañeros de profesión. Con estos últimos Nino repuso fuerzas y brindó por muchos años más con salud y éxitos. 

 

Reportaje de Pepe Machado.

Fotos de José Manuel Fernández "Raw" y Nagore Martín.

En la foto, de izquierda a derecha: Mochi, Mario del Castillo y su esposa, Valen, Pepe Machado y Nino Sánchez, tras el concierto.